Dos por semana (o más)

Publicidad y Comunicación Corporativa en los Medios Interactivos

Archivo de octubre, 2008

eMule vs Bicing

Por poner un ejemplo…

En qué se parecen eMule y Bicing? En que son servicios usados y compartidos por muchas personas.

Pero en qué se diferencian? En que mientras que el servicio de bicicletas de Barcelona se satura y deteriora a medida que lo utiliza cada vez más gente (disponibilidad, calidad, …), los servicios freemium (acrónimo que combina las palabras “free” y “premium” y que está estrechamente relacionado con la web 2.0) como, por ejemplo, eMule, Flickr o Skype, mejoran su calidad y eficacia a medida que son compartidos y utilizados por más usuarios.

Pero, entonces, si pagamos a cambio de calidad, por qué la gente paga, y con gusto, por tener que recorrer media ciudad para encontrar un sitio libre donde poder dejar la bicicleta y luego tener que coger el metro para llegar al sitio donde querías ir en un principio?

Un poco de todo y mucho de nada…

Mucha faena acumulada. Organización. Miro la agenda: actualizar blog interactivos. Enciendo el portátil. Mientras se carga, empiezo a pensar… De qué puedo hablar hoy? Bueno, de mientras que me llega la inspiración, abro el mail. Contesto un correo y reenvío un par de powerpoints. Entro en Facebook. Voy de un sitio a otro. Me hago de este grupo, miro un álbum, me etiqueto en un par de fotos, escribo en el muro de no sé quién… Ya me estoy liando. Tengo que actualizar el blog. Entro en WordPress. New post. Pero me acuerdo de un vídeo en YouTube que me dijeron el otro día y de ahí llego a un par de videoclips. Déjate de historias. El blog! Vuelvo. Pienso… (o lo intento). Pero no se me ocurre nada. Empiezo a mirar fotos de las vacaciones y abro una conversación por MSN. Nada interesante, pero todo sea por no pensar. Pero me puede la conciencia y me despido: “Oye te dejo. Que tengo faena y no estoy haciendo nada…”. Vamos a ello! A ver si hay suerte…

Te suena? Al menos, para mí, es una realidad casi diaria. Bueno, diaria. Puedo pasarme horas y horas delante de la pantalla, de un lado para otro, pero haciendo qué? Poco, muy poco. Casi nada.

Es la distracción por el exceso de información (infoglut). Lo que implica, evidentemente, un bajo rendimiento. Por ello, GTD (Getting Things Done), en relación a la gestión del tiempo, plantea y desarrolla sistemas como, por ejemplo, editores sin formato,  que evitan esta distracción constante y que permiten optimizar cada segundo de trabajo garantizando una mayor concentración.

Pero no, no toda la culpa es de Internet. Demasiado fácil. Porque, cuando no existía la web, cuántos de vosotros pasabais horas y horas delante de la TV sin hacer prácticamente nada? Ahí lo dejo (por si otro día no tengo tema!).

Todo depende…

Seguro que más de una vez habéis escuchado eso de que las cosas ni son buenas ni son malas, sino que depende del uso que se haga de ellas (y del cristal desde el que se mire). Y parece que estamos todos de acuerdo. Bueno, todos todos no.

Jerry Mander, en “Four arguments for the elimination of the TV”, expone que la televisión siempre es mala, independientemente de su uso y de sus contenidos, como una pistola que, se use como se use, siempre sirve para matar.

Estamos de acuerdo? Con lo de la pistola sí, con lo de la TV no tanto. Pero demagogia aparte… Entonces qué pasa con Internet? Con Youtube? Con Facebook? … Excelentes herramientas si se hace un buen uso, pero terribles si abusamos de ellas con malas intenciones. Así que, respetando a Jerry Mander (pero discrepando con su teoría), mantengo que determinadas cosas son buenas o malas dependiendo del uso que hagamos de ellas… Pero, cuidado, que la Web 2.0 tiene muy buena puntería y cuando tira, da (y duele!)

Dime qué compras y te diré quién eres

Pongamos por caso que te quieres comprar un Golf. Qué harías? Ir al concesionario de VW? O preguntarle a amigos, conocidos y compañeros que tienen ese mismo coche sobre su experiencia? (Si estás pensando en la primera opción, no lo digas, tienes que decir la segunda. LA SEGUNDA!).

Pues sí. La segunda. Y es que el ser humano es así: nos gusta comparar, opinar, pensar, reflexionar, compartir experiencias, decidir en base a los comentarios de los demás… Una conversación mercantil, por así decirlo, que el mass marketing nos había arrebatado, pero Internet, que puede con todo (y más), nos ha devuelto en forma de comunidades, blogs y sitios como Amazon, que muestra los comentarios y opiniones sobre libros y otros productos en base a las experiencias personales de los consumidores. Sí, se pueden perder usuarios, puede ser. Pero a cambio se ganan clientes convencidos y seguros de sus compras que, al fin y al cabo, es lo que interesa. Fidelidad y feedback, como en los mercados de barrio pero a través de la pantalla. Quién da más?

 

A qué estamos jugando…

Ahora que llega el invierno (cualquiera lo diría con este tiempo), llegan los fines de semana de reunión con los amigos en el local que compartes o en casa de no sé quién (o de los padres de no sé quién)… Y con ello, llegan las tardes / noches / madrugadas de competiciones deportivas (a veces ridículas) de Wii, de Singstar (aún más ridículas si cabe) y Pro en la Play, de ponerse a prueba mentalmente en la Nintendo DS…

Bueno, lo del invierno era una manera de empezar la entrada porque para jugar tanto da si es invierno como verano… Pero sigamos.

Aunque ahora estemos “enganchadísimos” (unos más que otros) a nuestra Wii, a nuestra PS3, a nuestra PSP, a nuestra Nintendo DS (¡viva la crisis!)…; esto no nos viene de nuevo porque hubo un tiempo, que parece lejano pero no lo es tanto, en el que nos pasaba exactamente lo mismo con la Gameboy (yo era de Tetris y Donkey Kong), Sega MegaDrive, NES… QUÉ TIEMPOS!!!

Pero aún antes de todo eso, sobre 1953, la CBS estrenaba el primer programa de TV interactivo, “Winky Dink and You”, donde los niños podían dibujar y ayudar a los personajes de la serie mediante un plástico transparente…

Por lo que parece, por muy fascinados que nos tenga la Wii (y lo que queda por venir) hace ya más de 50 años que existían programas y juegos que permitían un feedback importante y que ya indicaban cuál sería el futuro de los videojuegos interactivos. En fin, ver para creer… (y para jugar, sobre todo para jugar).

 

PS: Voy a echar una partida de bolos, a calcular mi edad mental y a desafinar una canción de Paulina Rubio; y eso que ni es fin de semana ni todavía ha llegado el invierno…

 

Gatos y perros

Aunque las madres critican por igual el tirarse horas delante de la TV o del ordenador (todo sea por quejarse), no es lo mismo una cosa que la otra. Ni mucho menos! Cuando nos sentamos / tiramos / tumbamos (eso ya depende del grado de vagancia de cada cual) en el sofá y vemos la tele (se sobreentiende que encendida, o no) adoptamos una posición canina, en la que nos posee un espíritu más bien pasivo.

Sin embargo, cuando nos ponemos frente al ordenador, ya sea tu ordenador de MediaMarkt que se cuelga si actualizas el WordPress mientras escuchas Marea o tu Mac de diseño en el que nunca entran virus, adoptamos una posición felina que implica una mayor actividad, predisposición y productividad.

Un claro ejemplo es, para mí, el vídeo Wikipedia Timelapse de la VT Massacre; en el que podemos ver cómo evolucionan los contenidos y las informaciones en Wikipedia a medida que transcurren los hechos.

En fin, una vez más, otro claro punto a favor… WE ARE THE WEB.

 

Perros, gatos (tigres tigres, leones leones, todos quieren ser los campeones)…  Y tú de quién eres? Demostremos que no somos tan vagos como nos pintan!

 

We are the web

Volviendo a ver el vídeo de Michael Wesh (“Web 2.0: The machine is us/ing us”) me doy cuenta, una vez más, de lo rápido que va todo (no en el vídeo, que también, sino en la vida).

Pero entre todas las verdades, sobre todo, me quedo con la reflexión final: “We’ll need to rethink a few things… Copyright, authorship, identity, ethics, aesthetics, rhetorics, governance, privacy, commerce, love, family, ourselves…”

Y tanto. Nos hemos acostumbrado tan rápido a todo lo que nos ofrece la Web 2.0 y las nuevas tecnologías, que nos hemos convertido en unos consumidores feroces y despiadados. Y dónde queda la intimidad? La protección de datos? La ética? El control de los contenidos? …

Pero no, yo no creo que sea la máquina la que nos domina. Lo que nos domina es el poder que nosotros ejercemos sobre la máquina. El poder de tener todo lo que podemos desear. Y ya, al instante, sin tiempo para pensarlo dos veces. Lo quieres, lo creas, lo tienes… Porque sí, nosotros somos la web. Somos nosotros los que creamos contenidos. Y, por lo tanto, debemos repensar algunas cosas, pero, sobre todo, debemos reflexionar sobre nosotros mismos. Lo malo está en que en el vídeo podemos darle al pause y pararnos a pensar, pero en la vida no…

Mientras llega la inspiración…

Lo primero que hago cuando llego a casa es encender el portátil. Abro el Messenger. Miro el gmail. Actualizo el fotolog. Entro en facebook y chafardeo un poco. Miro un par de vídeos en Youtube. Busco algo en Google mientras miro si hay algo colgado en el Moodle…

A esta rutina se suma ahora el wordpress. No sé cómo empezar ni qué escribir. Después de darle vueltas me he puesto a pensar qué era lo primero que hacía cuando llegaba a casa antes de tener internet. Seguramente sentarme en el sofá y encender la tele. No lo sé… De lo que sí me acuerdo era de cuando esperaba a que fueran las 6 de la tarde para conectarme en un ordenador de 4 Gb que compartía con mi hermano y justo cuando conseguía cargar el chat de Terra y encontrar la canción que quería en Napster se me cortaba la línea porque mi abuela llamaba a casa; de cuando todavía se escribían cartas a mano y se hacía cola en las cabinas; de cuando no existía el móvil, ni los sms, ni las llamadas perdidas; de cuando los trabajos del colegio se hacían con enciclopedias y no con un par de clicks en Google… Todo eso parece que queda muy lejos, pero en realidad no hace tanto tiempo.

Pero qué sería de nosotros ahora sin Internet? Nos hemos acostumbrado muy rápido a tener todo lo que queremos cuando lo queremos (¡¡¡YA!!!); un par de clicks sin salir de casa, a cualquier hora, en muy poco tiempo… Internet es mejor que ir de compras: está abierto las 24h del día durante todo el año y no cierra domingos ni festivos. Pero, en realidad, hubo un tiempo en el que vivíamos sin Messenger, sin iPods, sin Google, sin Ares, sin YouTube, sin eBay, sin Facebook, sin Mac, sin Fotolog, sin Gmail, sin Vueling, sin Flickr… Y sobrevivíamos! Pero, a veces, no es verdad eso que dicen de que cualquier tiempo pasado fue mejor. De hecho, si fuera así, seguramente éste no sería el método de evaluación de una asignatura de Publicidad y RRPP y nuestra futura profesión se limitaría a spots, cuñas y anuncios gráficos. Es más, seguramente ahora mismo estaríamos haciendo trabajos a mano o pegando sellos a nuestras cartas mientras escuchamos nuestro CD favorito en el disckman.